El dolor no prescribe : la prescripción en los delitos contra la integridad sexual

Abstract

El presente trabajo tiene como objetivo analizar el instituto de la “Prescripción” en los delitos sexuales, sus alcances y aplicación en los distintos supuestos, con el fin específico de poner de relieve que un instituto procesal actualmente tiene más peso que el derecho de las víctimas de obtener justicia y que su dolor sea visibilizado. De esta manera, se pretende concientizar sobre la necesidad de debatir sobre la implementación de nuevas leyes y medidas que garanticen de una forma u otra el acceso a la justicia para las víctimas de estos delitos, sea eliminando barreras procesales o implementando más eficientemente vías alternativas al sistema penal. Bajo el actual régimen, son sólo los niños, niñas y adolescentes quienes tienen asegurado ese derecho gracias a la Ley No 26.705 del año 2011 (“Ley Piazza”) que modificó el art. 63 del Código Penal de la Nación, y a la Ley No 27.206 (“Respeto a los tiempos de las víctimas de delitos contra la integridad sexual”), sancionada en 2015 que modificó el art. 67 del mismo código estableciendo que la prescripción está suspendida mientras la víctima sea menor de edad y hasta que, habiendo cumplido la mayoría de edad, la persona formule por sí la denuncia o ratifique la realizada por sus representantes legales durante su minoría de edad. Pero, ¿qué sucede con las víctimas que al momento del hecho eran mayores de edad? En virtud de ello, analizaremos el bloque normativo de nuestro país, la opinión de la doctrina, jurisprudencia y haremos una breve referencia del derecho comparado. Por último, haremos mención de herramientas alternativas a las vías judiciales que, si bien no arriban a condenas con finalidad punitiva o sancionatoria, generan una especie de condena simbólica que alivia (al menos en parte) el dolor de las víctimas que, por una cuestión de naturaleza procesal, no logran acceder a la justicia.

The objective of this work is to analyze the institute of “Prescription” in sexual crimes, its scope and application in different cases, with the specific purpose of highlighting that a procedural institute currently has more weight than the rights of the victims. to obtain justice and have their pain made visible. In this way, the aim is to raise awareness about the need to debate the implementation of new laws and measures that guarantee in one way or another access to justice for the victims of these crimes, either by eliminating procedural barriers or by more efficiently implementing alternative means to justice. penal system. Under the current regime, it is only children and adolescents who have this right assured thanks to Law No. 26,705 of 2011 (“Piazza Law”) that modified art. 63 of the National Penal Code, and Law No. 27,206 (“Respect for the times of victims of crimes against sexual integrity”), enacted in 2015, which modified art. 67 of the same code establishing that the prescription is suspended as long as the victim is a minor and until, having reached the age of majority, the person files the complaint themselves or ratifies the complaint made by their legal representatives during their minority. But what happens to the victims who were of legal age at the time of the incident? By virtue of this, we will analyze the regulatory block of our country, the opinion of the doctrine, jurisprudence and we will make a brief reference to comparative law. Finally, we will mention alternative tools to judicial means that, although they do not lead to sentences with punitive or sanctioning purposes, generate a type of symbolic sentence that alleviates (at least in part) the pain of the victims who, for a reason of a procedural nature, they are unable to access justice.